Ficción
Advertencia: se ha determinado que pasar mucho tiempo en esta área provoca adicción. Tome sus previsiones.
Un cuentico púber
A lo sumo tendría nueve años. A esa edad su cabello ya era una tristeza. Era tan flaca que a uno no le quedaba sino el desconcierto como abreboca para otro sentimiento mayor. Julie creció paralela a su melancolía y trató de enamorarse.
La ciudad de la muerte
Siente cómo una mano le va atravesando la espalda y el dolor se intensifica. La mano pasa por el estómago; luego por el corazón, haciendo a un lado los pulmones.
El polvo del difunto
—¿Cómo repartimos las cenizas del difunto? –fue la inquietante pregunta que resonó en la mente de la viuda al sostener en sus guantes negros el ardiente cofre con las cenizas de su esposo.
La mano
Siente cómo una mano le va atravesando la espalda y el dolor se intensifica. La mano pasa por el estómago; luego por el corazón, haciendo a un lado los pulmones.
Cicatrices, un adelanto de la novela de Alicia Chávez
Cicatrices: «Alex me besó y me tocó toda, por dentro y por fuera. Sabía que esto te iba a gustar, Ana Helena. Era el único que me llamaba por mis dos nombres, como si al hacerlo dejara claro que poseía más de mí que otros. Luego nos emborrachamos en la puerta del mausoleo mientras caía la noche».
Pelícanos
Los pelícanos raquíticos se dejaban caer de manera perpendicular. No cazaban nada y su terrible historia tenía que empezar, otra vez.
Ella reanudó la imagen que me tuvo hipnotizado. Frente a nosotros aparecieron tres personas que seguían viendo al mar (ya no eran cuatro). El buque pulía el horizonte.
No se me ocurrió preguntar
Por lo tanto, lo mantenía en secreto con sigilosa discreción. Me daba la impresión de que los demás niños, mi hermano, mis primos, mis amigos, no experimentaban una sensación similar.
¿Cómo se sentiría Ricardo? No parecía tan indispuesto como yo.
Quizás, se sentía igual o peor. Quizás, como yo, prefería disimular. No se me ocurrió preguntar.
La colmena de amor y letras
—Te vi salir de ese edificio al cruzar –se sonrojó.
—Así es. Estuve ahí –dije apenado.
—¿Ahí queda la Colmena o algo así?
Josefina
Josefina era una niña, tenía apenas 16 años. Flaca y esmirriada con los ojos grandes y ojerosos, cabello cenizo y largo, siempre usaba vestidos rojos. Aún no había terminado de desarrollarse cuando viniendo del colegio, un día que Carmen no pudo ir por ella, encontró la desgracia.
El difunto entre las piernas
La viuda arrastró su cuerpo hasta la habitación abrazando al difunto entre sus pechos.
Suscríbete a nuestro boletín
Prometido: vamos a enviarte pura información cool, de esa que de seguro te interesa (chismecitos literarios, cosas para reir, tips para tu guion, etcétera). Y, obvio, también te mantendremos al tanto de todas las novedades con respecto a nuestros talleres.

Quiénes somos
Una productora cultural que trabaja en torno a la literatura, el cine, las series y el humor. Nuestra actividad principal es organizar talleres formativos en esas disciplinas.
Links del Sitio
Contacto
Para información sobre los talleres y nuestros libros:
inscripcionesc.amarillo@gmail.com
Para cualquier otra información:
productorac.amarillo@gmail.com