Ficción
¿Por qué leer Julián, de Eduardo Sánchez Rugeles?
Por Lizandro Samuel
Las dos obras más famosas de Eduardo Sánchez Rugeles son Blue Label y Liubliana. La primera puso a leer a miles de jóvenes; la segunda, lo consolidó como uno de los narradores venezolanos más destacados de la actualidad. Más allá de los flashes que acumulan estas novelas, tiene títulos igual de valiosos, en los que, por lo general, sobresalen personajes que se enfrentan al desarraigo, al hecho de ser parte de un país violento y destruido. Personajes hartos de ser víctimas de su origen. Todas más o menos tocan esos puntos, salvo una: Julián.
Bueno, para ser franco, quizá allí también se bordean algunas de las inquietudes de las otras obras, pero aquí el contexto es totalmente diferente: el protagonista es un niño de nueve años que padece una enfermedad. Es él mismo quien narra la historia, con la mirada acorde a su momento biológico: sobresalen la inocencia, la ternura y la curiosidad. Son especialmente conmovedores los momentos en los que espía a sus padres o en los que los ve/oye sin que ellos se den cuenta.
El tono es diferente al de los otros libros. La atmósfera es suave, cálida, hasta divertida: Julián, junto a sus amigos, invita al lector a disfrutar de una aventura particular en la Venezuela de los 90. La novela, en consecuencia, tiene la virtud de los mejores dramas: te hace bajar las defensas para ponerte el dedo en la llaga sin que te des cuenta.
Datos sobre Julián
- Categoría: novela de ficción.
- La primera edición de Julián corresponde al 2014.
- Lo publicó por primera vez Ediciones B.
- Julián tiene 192 páginas.
- En Goodreads, Julián cuenta con cuatro estrellas, 207 votantes y 33 reseñas.
- Julián es la quinta novela que publicó Eduardo Sánchez Rugeles.
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